Que es una sociedad profesional

Organizaciones profesionales de libre afiliación

Muchas sociedades profesionales, o disciplinarias, se fundaron para apoyar las disciplinas individuales que les dan nombre.1 Sin embargo, en las últimas décadas, estas sociedades, al igual que muchas otras organizaciones, se han visto obligadas a ampliar sus relaciones a nuevos campos de investigación. Además, ha surgido una nueva clase de sociedad profesional, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial, que es principalmente interdisciplinaria (véase el Apéndice D). Entre las numerosas sociedades interdisciplinarias se encuentran la Sociedad de Informática del IEEE (1946), la Sociedad de Matemática Industrial y Aplicada (1952), la Sociedad de Biofísica (1956), la Sociedad de Ingeniería Biomédica (1968) y la Sociedad de Investigación de Materiales (1973) (véase la figura 7-1).

La misión de las sociedades profesionales es principalmente educativa e informativa. Su influencia se deriva de sus funciones continuas y muy visibles: publicar revistas profesionales, desarrollar la excelencia profesional, sensibilizar al público y conceder premios. A través de su trabajo, ayudan a definir y establecer normas para sus campos profesionales y a promover altos niveles de calidad mediante premios y otras formas de reconocimiento.

Ejemplos de sociedades profesionales

El trabajo suele constituir una gran parte de la identidad de cada uno, ya que se pasa tanto tiempo con los compañeros de trabajo y de profesión que tiene sentido agruparse para intentar avanzar en el campo en el que se trabaja. En esta última serie de blogs, analizamos las asociaciones profesionales como instituciones democráticas y su impacto.

Leer más  Plan financiero de una empresa

El concepto que subyace a una asociación con miembros basados en la profesión es el de hacer avanzar, debatir y proteger esa profesión. Además, se hace hincapié en los aspectos más sociales de conocer a otros profesionales.

Las asociaciones profesionales se comparan a menudo con los sindicatos. De hecho, los sindicatos son un tipo de asociación, pero con una diferencia significativa: se les concede el derecho a negociar colectivamente con los empresarios, pero son considerablemente menos formales. Las asociaciones profesionales son, por tanto, considerablemente menos formales. Se encargan de todo, desde presionar a los gobiernos locales, regionales y nacionales en interés de sus miembros hasta ofrecerles formación y eventos de networking para fortalecer sus respectivas profesiones.

Lista de asociaciones profesionales

Muchas sociedades profesionales, o disciplinarias, se fundaron para apoyar las disciplinas individuales que les dan nombre.1 Sin embargo, en las últimas décadas, estas sociedades, al igual que muchas otras organizaciones, se han visto obligadas a ampliar sus relaciones a nuevos campos de investigación. Además, ha surgido una nueva clase de sociedad profesional, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial, que es principalmente interdisciplinaria (véase el Apéndice D). Entre las numerosas sociedades interdisciplinarias se encuentran la Sociedad de Informática del IEEE (1946), la Sociedad de Matemática Industrial y Aplicada (1952), la Sociedad de Biofísica (1956), la Sociedad de Ingeniería Biomédica (1968) y la Sociedad de Investigación de Materiales (1973) (véase la figura 7-1).

La misión de las sociedades profesionales es principalmente educativa e informativa. Su influencia se deriva de sus funciones continuas y muy visibles: publicar revistas profesionales, desarrollar la excelencia profesional, sensibilizar al público y conceder premios. A través de su trabajo, ayudan a definir y establecer normas para sus campos profesionales y a promover altos niveles de calidad mediante premios y otras formas de reconocimiento.

Leer más  Ideas para montar una tienda

Organizaciones profesionales a las que unirse

Los ejemplos y la perspectiva de este artículo pueden no representar una visión mundial del tema. Puedes mejorar este artículo, discutir el tema en la página de discusión o crear un nuevo artículo, según corresponda. (Febrero de 2017) (Aprende cómo y cuándo eliminar este mensaje de la plantilla)

La sección principal de este artículo puede ser demasiado corta para resumir adecuadamente los puntos clave. Por favor, considera la posibilidad de ampliar el lead para proporcionar una visión general accesible de todos los aspectos importantes del artículo. (Agosto de 2019)

Los ejemplos y la perspectiva de este artículo pueden no representar una visión mundial del tema. Puedes mejorar este artículo, discutir el tema en la página de discusión o crear un nuevo artículo, según corresponda. (Agosto de 2019) (Aprende cómo y cuándo eliminar este mensaje de la plantilla)

El economista Lok Sang Ho en su obra Public Policy and the Public Interest[2] sostiene que el interés público debe ser evaluado de manera imparcial y, por lo tanto, define el interés público como el “bienestar ex ante del individuo representativo”[3] Bajo un experimento mental, al suponer que existe la misma posibilidad de ser cualquier persona en la sociedad y, por lo tanto, podría beneficiarse o sufrir un cambio, el interés público es por definición mayor siempre que ese cambio sea preferido al statu quo ex ante. Este enfoque es “ex ante”, en el sentido de que el cambio no se evalúa a posteriori, sino que se valora antes del hecho, sin saber si uno se beneficiaría o sufriría realmente.